No era un sueño. No.aquella tarde lluviosa de abril; cuando abrí la puerta del departamento un sobre con estampillas de México yacía en el suelo.Mi primer pensamiento fue; ya no tengo amigos allá.Cuando vi el remitente creí que el corazón me iba estallar. En la Navidad de 1989 habían aparecido los restos de Marcelo Gelman. El dolor me llevó de la mano , escribí un poema. Se lo envié a Jorge Lanata( en ese momento director de Página 12), pidiéndole que se lo hiciese llegar a Juan G. Esta fue su respuesta, porque los grandes están imbuidos de humildad y se toman tiempo para los pequeños poetas. Así comenzó un ir y venir de cartas entre el Poeta y yo.Este es el regalo de Fin de Año que comparto con todos ustedes.
Mexico,12 de Marzo de 1990
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5 comentarios:
Gracias por el regalo, Silvia, de compartir las palabras de Juan Poeta.
Qué honor para vos,
Un abrazo,
Susana Gentile
Imagino la emoción de recibir una carta del Juan, el Gran Poeta.
Pero hay algo que resalto, Lanata, si n conocerte, le envia la carta a Gelman...Esos son grandes, no quienes guardan sus contactos como si fuese una pepita de oro, y despues se llenan la boca hablando de solidaridad.
Un abrazo,
Alicia
Emocionante y demuestra Gelman que la humildad es de los grandes, se conoce tanto ego por ahí que Gelman es un maestro que nos enseña.
Gracias Silvia, saludos Gus.
¡ al fin te atrevés a mostrar, aunque sea una!Una carta de Gelman,de Juan G. ( como lo llamás).Demostracion de la grandeza de su alma, de tu sensibilidad al llegar a él. .
Abrazos,
Sebastián
No hay grandes y pequeños poetas, hay mujeres y hombres que escriben.
Si no hay humildad, no hay poesía,
felicitaciones por el intercambio, a él también se le debe haber conmovido el tuétano.
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