26 de agosto de 2008

Poetas beat, Jack Kerouac


Jean-Louis Lebris Kerouac (1922, Lowell-1969, Florida). Hijo de Leo Alcides (impresor) y Gabrielle A.Levesque (trabajadora del calzado). Firmaría sus trabajos como Jack Kerouac y también con los seudónimos Jean-Louis Incognitan, Jean-Louis y John Kerouac. Habló solo francés hasta los 7 años. Se educó en la Orase Mann School de New York, en la Universidad de Columbia (1940-42) y en la New School for Social Research (1948-49). Fue jugador de fútbol americano y marino mercante. Desempeñó trabajos diversos. Se casó tres veces y tuvo una hija, Jan Mitchell Hackett.

Publicó como John Kerouac una primera novela El campo y la ciudad (1950) de estilo pausado y minucioso, que reconstruía su infancia y adolescencia en Lowell y la trama familiar. Conocer a Allen Ginsberg, W.Burroughs y sobre todo a Neal Cassydy- un auténtico vendaval existencial para todos los beats, que casi no llegó a escribir ni a publicar obra propia- le hicieron cambiar por completo el estilo y su proyecto. Terminó por plantearse un extenso libro en varios tomos, al estilo Proust, pero defendiendo una estética del espontaneismo puro, que dejaba fluir sin trabas el pensamiento, las sensaciones, el lenguaje.

Había una contradicción entre su proyecto de puro fluir sin retoques y las numerosas correcciones que sufrió su clásico absoluto, En el camino (1957).también la hubo entre su entrega al estudio y ejercicio del budismo y su catolicismo; entre la mística del movimiento on the road de su libro principal y sus regresos continuos ( que al fin fue definitivo) a la casa de su madre (Memére); entre su honesta búsqueda de distintas liberaciones y sus ideas reaccionarias de los últimos años. La figura de padre muriendo de cáncer (a quien cuidó varios meses), dedicado a abatir su vocación literaria, dejó una fuerte marca en él.

El éxito arrasador de En el camino le complicó la vida creativa y personal y lo hizo entregarse por entero a la bebida, principal causa de su muerte. Trató de ser tan libre como sus compañeros de generación, en su vida sexual (Ginsberg, Cassidy y sus hombres y mujeres). Viajó por México, por América y brevemente por Francia sin encontrar sus raíces.

Es muy probable que parte de la mejor poesía resida en sus mejores libros de prosa.En sus novelas En el camino, Los vagabundos del Drama, Big Sur.

Era considerado por Ginsberg como el mayor creador norteamericano de haikus.Pueden citarse su extenso poema en coros, México City Blues, Poemas dispersos, Poems all size y el extenso Mar. S.L.



Haikus

Bajé de mí

torre de marfil

y no encontré el mundo.

**

La luna,

estrella errante…

Mira a otra parte.

**

Mujer

Una mujer es hermosa

pero

tienes que hamacarte

y hamacarte y hamacarte como

un pañuelo en el

viento.

Dama

El universo es una dama

Que guarda dentro de sí la luz nonata…

Nuestra Dama, Notre Dame.

Es adecuado que Nostradamus pudiera predecir el

futuro.

Esa es la fusión de nuestra dama,

Nosotros las hojas de té.

Coro 103º

Mi padre en el rojo del centro

Caminaba como una sombra

De tinta negra, con sombrero, saludando

En las luces inmemoriales de mis sueños.

Porque desde entonces he soñado con Lowell

Y la imagen de mi padre,

Sombrero de paja, diario en el bolsillo,

Licor en el aliento, zapatos lustrados en la peluquería,

Es la imagen del Hombre Ignorante

Apresurándose hacía su destino que es la muerte

Aunque él no lo sabe.

Por eso dicen Salud

una botella, un vaso,un trago,

Una copa de coraje…

Los hombres saben que la niebla no es su amiga

Salen de los campos y se ponen abrigos

Y se vuelven hombres de negocios y mueren rancios

La misma muerte horrenda

Que podrían haber muerto en las montañas

de estiércol del campo.

El recuerdo de i padre

En el centro de Lowell

caminando como una figura de cartón

a través de las luces perdidas

es el mismo material vacío

que mi padre en la tumba.


2 comentarios:

Avesdelcielo dijo...

Yo también encuentro a Kerouac contradictorio, pero quizás esta característica lo ha hecho buscar su propio estilo. Una maravilla encontrar juntos este ramillete de sus haikus.
MARITA RAGOZZA

Anónimo dijo...

Silvia, que más comentario con esa
loca travesía de las palabras, que dibujan el flujo de las ideas o pensamientos de la realidad y a la vez su detacada ficción que impone la musa poesía. Conozco muy a fondo al escritor de: Los vaga-bundos del Darma, la corriente Beat
de la generación del 60.
Tu labor es muy interesante. Pepe