4 de noviembre de 2009

Robert Desnos(1904-1945)-Poeta surrealista


Cada vez que releo a Desnos vuelvo a un lejano , lejano verano, antes de la época de los Oscuros; con mi compañero llegamos a dedo hasta Bolivia, la poesía Desnos era el único libro que me acompañó. También en este poeta admiro su compromiso de vida;
en la segunda guerra mundial se alistó en el ejército francés, regresó a París durante la ocupación alemana y bajo seudónimos como Lucien Gallois y Pierre Andier, publicó una serie de ensayos contra los nazis que le valieron su reclusión en varios campos de concentración. Falleció ocho días después de ser liberado por el ejército ruso en junio de 1945.


Destino arbitrario

a Georges Malkzine
Ahora llega el tiempo de las cruzadas.
Por las ventanas cerradas los pájaros se obstinan en hablar
como peces de acuario.
Junto al escaparate de una tienda
una bonita mujer sonríe.
Felicidad no eres sino lacre
y yo paso como un fuego fatuo.
Una multitud de guardianes persigue
a una mariposa inofensiva fugada del asilo.
Se torna en mis manos calzón de encaje
y tu carne se torna de águila
¡oh sueño mío cuando te acaricio!
Mañana habrá entierros gratuitos
ya no se resfriarán
hablarán el lenguaje de las flores
se iluminarán con luces hasta ahora desconocidas.
Pero hoy es hoy.
Siento que mi comienzo está próximo
semejante al trigo de junio.
Gendarmes ponedme las esposas.
Las estatuas vuelven la espalda sin obedecer.
En su zócalo inscribiría injurias y el nombre de mi peor enemigo.
Allá lejos en el océano entre dos aguas
un bello cuerpo de mujer hace retroceder a los tiburones.
Suben a la superficie para contemplarse en el aire
y no se atreven a morder esos senos
esos senos deliciosos.
C'est les bottes de sept lieues
cette phrase "Je me vois"

El cementerio

Aquí estará mi tumba, y sólo aquí, bajo tres árboles.
Recojo sus primeras hojas primaverales
Entre un zócalo de granito y una columna de mármol.
Recojo sus primeras hojas primaverales,
Pero otras hojas nacerán de la feliz podredumbre
De este cuerpo que, si puede, vivirá cien mil años.
Pero otras hojas nacerán de la feliz podredumbre,
Pero otras hojas se ennegrecerán
Bajo la pluma de los que cuentan sus aventuras.
Pero otras hojas se ennegrecerán
Con una tinta más líquida que la sangre y que el agua de las fuentes:
Testamentos incumplidos, palabras que se pierden más allá de los montes.
Con una tinta más líquida que la sangre y que el agua de las fuentes,
¿ Podré yo defender mi memoria del olvido
Como una jibia que huye perdiendo la sangre, perdiendo el aliento?
¿ Podré yo defender mi memoria del olvido?


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