Maria Eugenia (Mariu) nació en
Sonsonete
devuélveme sin laberintos a encontrarte
arrancado fusilante a contraluz el verso.
(Tu voz cayendo al infinito fruto alado nomeolvides nunca
bruñéndome la oreja).
Bostézame tu amanecer en la quijada
crujiendo tan sublime ambigüedad al dente
tuétano del gesto.
Tras ese dulce cadáver de compases se me van los dedos.
Evaporaciones
Lo acosó la idea de la suerte
pero se esfumó en la solera
de las yeguas cojas
derramando su especie mineral
en el acantilado de la ausencia.
Lo asustó el bosque del capitel campestre
sus bueyes macilentos apareados
sus gárgolas de pájaros
de gallos y gallinas con crestas de caliza
abandonando el rojo
en las evaporaciones del crepúsculo
y una manada de abejas
anaranjando el aire.
La fuga de la luz
lo empedraba de retiros.
nada habitaba aquel sueño amarillo
con rayos de dolor.
más cerca tal vez
pero con vuelo
el calor de otro color
poseyéndolo le mordisqueaba.
2 comentarios:
Muy buenos los poemas de María Eugenia Caseiro.
Gabriela Abeal.
La gran Mariú también por aquí!... Es una alegría encontrarla ya que su obra merece ser difundida a lo largo y a lo ancho de todo el planeta.
Un cálido abrazo,
Aníbal Jorge Sciorra
Publicar un comentario